QUE DEBERÁN PEDIR AYUDA
PARA RECOGER LAS ALMAS QUE SE ACERQUEN
9 de diciembre de 1985
Digo a mis ovejas hoy: Mi mano es firme, mi pulso no tiembla al guiar a mi rebaño.
Vuelvan al camino de la verdad.
¿Quién puede escribir a oscuras? Yo soy la luz que viene de lo alto y alumbra a todos por igual.
Aunque cierren sus ojos y crean no verme, allí estoy.
Es el tercer tiempo de la misión, ahora vendrá más trabajo que antes y más éxitos, con más dolor. Como en la cruz mi dolor fue triunfo, así ustedes triunfarán mediante el dolor y serán fuertes, cuanto más débiles se sientan, porque Yo me moveré entre ustedes y llenaré sus redes tanto que deberán pedir ayuda para recoger las almas que se acerquen. Tengan confianza en su Dios y esperen.
Oren continuamente y estén unidos en un mismo espíritu, sepan escucharse. Hablen de mí con confianza, que cuando se habla de mí, me hago presente.
Es el tiempo final el que se acerca, la verdad está hablando, la verdad debe ser escuchada y transmitida a todos. Antes de navidad hablaré a toda la Iglesia.
Les dejo la paz y mi bendición.
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ASOCIACIÓN DE LAICOS CATÓLICOS