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Edición Nro. 41

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DONDE VEÁIS CONVENTOS
Y SEMINARIOS VACÍOS

13 de octubre de 1995

Mi paz a vosotros, ovejas de mi grey.
Cumplid como se os ha enseñado pidiendo al dueño del campo que envíe obreros a su mies. Orad frecuentemente por más vocaciones, mas sabed que vuestras oraciones serán oídas y se enviará nuevos sacerdotes, religiosos y religiosas a aquellos lugares en los que su formación garantice el mejor servicio al Altar del Señor. Pues en aquellos sitios en los que se enseñen doctrinas desviadas, en aquellas órdenes religiosas donde no se respete el espíritu de sus fundadores, no habrá, pues, vocaciones florecientes, puesto que si las hay se corre el riesgo de que sean arruinadas por los peligros que las rodean.
No dejéis de pedir para que el dueño del campo envíe más obreros a su mies y los enviará, pues, a aquellos lugares donde su trabajo será fructífero.
Dice el Señor: No daré mis hijos a las manos de mis enemigos, antes bien los guardaré y protegeré especialmente. Es ésta, pues, otra señal: donde veáis conventos y seminarios vacíos, falta de vocaciones, sabed que la responsabilidad principal está en aquellos que debiendo preparar el camino con su ejemplo realizan el efecto contrario, alejando a aquellos que sienten el llamado en su corazón, mas se desilusionan al ver los errores cometidos y no reparados a tiempo.
Será, pues, una gran señal, puesto que la fe se enfriará. Y no habrá quién lleve, casi, el auténtico testimonio del Evangelio. Por eso, también os he llamado a vosotros para que sigáis siendo puente efectivo y firme entre mis enseñanzas y la humanidad.
Tened paz. Os bendigo y a vuestras familias. Desead siempre que de ellas surjan vocaciones al servicio del Señor en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo (Todos responden: “Amén”).
No me llaméis Señor de vuestras vidas si cuando os pido un sacrificio os volvéis contra mí, pues en el último día seré Yo quién no os conozca, si ahora me negáis. Paz.

Lectura: Apocalipsis, Cap. 3, Vers. 1 al 6.





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