DE INVENTAR TAL FARSA
QUE LOGRE EL AUXILIO DIVINO
31 de julio de 1992
Así como una roca no puede sacar provecho del canto de los pájaros, así el mundo endurecido en su orgullo y autosuficiencia no puede sacar fruto de mis enseñanzas, en primer lugar por que no las entiende, y al no entenderlas las interpreta con su conocimiento humano, sin aplicar a ellas la fe y sin esperar la acción del Espíritu Santo; por eso al juzgarlas y al juzgar a quienes llevan mis palabras hoy, se equivoca, por eso antes doblarán su copa los árboles hasta el suelo que los orgullosos sus rodillas frente a mí. Y así como vosotros enseñáis a vuestros hijos, así el maligno enseña a los suyos, mas Yo abriré un camino seguro y firme dentro de un tiempo para que por ese camino las almas fieles a mí y unidas por la obediencia a esta Obra avancen raudamente en busca de la salvación propia y de sus hermanos. Mas aún debéis confiar, en la zozobra actual debéis aferraros a mi misericordia y saber esperar el tiempo, mi tiempo, está llegando. No os dejéis desmembrar de esta Obra, no os dejéis arrancar de vuestro lugar a mi lado por las vanas tentaciones del poder, del orgullo, de la sensualidad, de la gloria, del reconocimiento humano que son nada ante mí.
Esperad con confianza y veréis.
Tened paz, Yo os bendigo en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo (Todos responden: “Amén”).
Sabed que no existe hombre capaz de inventar tal farsa que logre el auxilio divino, sabédlo, estoy con quién estoy y lo demuestro. Paz.
Lectura: San Juan, Cap. 12, Vers. 44 al 50.
COPYRIGHT BY FUNDACIÓN MISERICORDIA DIVINA
ASOCIACIÓN DE LAICOS CATÓLICOS