NO PERDONA ERRORES; YO OS PROTEJO,
PERO NO BAJÉIS VUESTRA GUARDIA
LA PLATA, 5 de marzo de 1989
CENÁCULO NUESTRA SEÑORA DE TODAS LAS GRACIAS
No es fácil seguir al Señor, no es sencillo, pues el enemigo siempre alerta busca obstaculizar y destruir todos los caminos mas vosotros avanzad por el sendero seguro, avanzad, avanzad en la fe, avanzad en la esperanza, avanzad en el amor. Tenéis muchos objetivos que lograr aún: debéis lograr la oración perfecta, oración que signifique unión con vuestro Dios y conformidad plena con sus santos planes, con mis planes. Debéis alcanzar la paciencia para soportar las pruebas venideras, interiores y exteriores, que os santificarán y os harán crecer. Debéis alcanzar la humildad a través de la cual no os vanagloriaréis de vuestros triunfos obtenidos y todo lo pondréis en mis manos, es la única forma de alcanzar algo: depositadlo en mis manos. Si despositáis vuestros laureles sobre vuestra cabeza éstos marchitarán prontamente mas si ponéis vuestra corona y esperanza en mí, esto lo hará incorruptible y esta corona jamás terminará, porque Yo, el que nunca terminará os daré una gloria eterna si a mí recurrís.
Puedo y lo haré: bendeciros en todas partes; puedo y lo haré: bendecir a distancia los lugares y las cosas, pues mi Espíritu está en todas partes soplando; puedo y lo haré, puedo y lo haré, si creéis en mí.
Abrid vuestros corazones, ya estoy a la puerta y os llamo y en vosotros confío el peso de la responsabilidad por la salvación de muchas almas: no seáis descuidados, no os descuidéis pues mi enemigo y el vuestro no perdona errores. Yo os protejo pero no bajéis vuestra guardia.
Tened paz, os bendigo a vosotros, a todas vuestras intenciones, aún aquellas ocultas en vuestro corazón y a quienes vosotros habéis encomendado esta bendición.
Recibid la bendición a distancia que mi santo ángel la lleve hasta allí, en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. Amén, decid todos Amén (Todos responden: “Amén”). Así debéis decir cuando vuestro Dios está entre vosotros. Así sea significa: Señor, tu voluntad. Aprended y no olvidéis, Amén significa: Señor, como tú quieras.
Tened paz, os dejo mi paz que siempre está con vosotros y nunca os abandona.
Aprended en las pruebas, fortalecéos en el bien, llorad vuestros pecados, lamentad vuestra maldad pasada, abandonad vuestra arrogancia frente a los hombres, humilláos hasta el fondo y allí me hallaréis para elevaros hasta el Cielo.
Los que no entienden, comprenderán a través de vosotros, si os mantenéis firmes.
Tened paz, en cada momento estoy con vosotros.
Decid Amén (Todos responden: “Amén”). Tened paz.
Lectura: II Carta a los Corintios, Cap. 7, Vers. 1.
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