FUESEN PUESTOS EN PRÁCTICA
8 de diciembre de 1995
Sabed que no ha perdido vigencia, ni la perderá jamás, el decálogo que habéis recibido de manos de Dios como mandamientos de amor. Si estos diez mandamientos fuesen puestos en práctica tal y como os han sido enseñado muchísimas almas alcanzarían la salvación y muy diferente sería el estado del mundo.
Pues esta generación procede como las anteriores y copiando sus errores los perfecciona para mal, pues pasa de la indiferencia al combate abierto contra las enseñanzas de Dios. ¿Qué honor y qué gloria recibiré entonces de éstos que resisten mis mandatos, aún cuando conocen que son el camino de la salvación? Y aún peor, ¿qué haré y cómo procederé con aquellos que cambian, quitan o deforman mis mandamientos?
Aprended, pues, a practicarlos; pues, os repito, no han pasado ni pasarán y seguirán siendo por siempre la ley de Dios.
Yo os bendigo según vuestra entrega, según vuestro deseo de seguirme, según el amor que habéis manifestado a mi Madre así recibiréis en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo (Todos responden: “Amén”).
Quién la oye, me oye; quién la honra, me honra; quién la recibe, me recibe y se salvará, quién la desprecia, me desprecia, quién la olvida, me olvida, quién la combate, me combate y perecerá, pues Ella es mi Madre y os la he dado por vuestra. Aceptadla y amadla como tal. Paz.
Lectura: San Judas, Vers. 14 al 23.
COPYRIGHT BY FUNDACIÓN MISERICORDIA DIVINA
ASOCIACIÓN DE LAICOS CATÓLICOS