CARGANDO...
POR FAVOR, ESPERE...




Cargando...
PROFECÍAS CUMPLIDAS Y MENSAJES CONFIRMADOS
ADVERTENCIAS FINALES
MENSAJES UNIVERSALES
MENSAJES SOBRE ARGENTINA
MENSAJES ESPECIALES
EL BUEN PASTOR Nro. 1 al 10
EL BUEN PASTOR Nro. 11 al 20
EL BUEN PASTOR Nro. 21 al 30
EL BUEN PASTOR Nro. 31 al 40
EL BUEN PASTOR Nro. 41 al 47
ÚLTIMOS MENSAJES
CONOZCA NUESTROS SITIOS


Edición Nro. 37

ANTERIOR     |     SIGUIENTE






NO BASTA CON SOLO
PEDIR PERDÓN EXTERIORMENTE

22 de julio de 1994

La paz con vosotros, ovejas de mi grey.
Sabed que vuestra lengua, si no sabéis dominarla, puede llevaros a la perdición total y que no basta con arrepentiros lo que habéis dicho pues si con esto habéis herido el buen nombre, el honor o la fama de alguno de vuestros hermanos, debéis también reponerlo en la misma medida en que lo habéis destruido. Y si tenéis vosotros la desgracia de haber hablado contra la Obra del Señor, no es suficiente con arrepentiros interiormente, pues con más razón aún debéis reponer todo lo que habéis destruido. Pobre de aquél por cuya lengua otro hermano deje de pertenecer a esta Obra, pobre de aquél que guiado por su propio pensamiento emite opiniones que hacen a otros no acercarse hasta mi Obra, pobre de aquél que luchando por hacer prevalecer su propia idea sea hallado luchando contra Dios.
Recordadlo, pues, no basta con solo pedir perdón exteriormente, se debe enmendar el error, aliviando dentro de lo posible todo el dolor causado. Ese será el signo del verdadero arrepentimiento y atraerá sobre vosotros mi bendición. Mas si habiendo utilizado vuestra palabra luego no deseáis haceros responsables por lo dicho, lleváis mal camino, pues Yo mismo os pediré cuenta, pues no hay intimidad que no sea conocida por mí, ni pensamiento que escape a mi conocimiento.
Todos sabéis que soy justo Juez mas prefiero misericordia si os corregís a tiempo.
Paz, recibid mi bendición, en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo (Todos responden: “Amén”).
No seáis sepulcros blanqueados, sed flores perfumadas que alegran el jardín del Cielo.
Nuevamente paz a vosotros.

Lectura: Hebreos, Cap. 8, Vers. 1 al 7.





ANTERIOR     |     SIGUIENTE