Primeros Mensajes desde 1985
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16 de octubre de 1987
Cenáculo Jesús y María por la salvación de las almas
Ved como en la guerra los hombres utilizan sus comandos especiales para misiones difíciles a los cuales adiestran muy especialmente, bien, si os decidís a cumplir con lo que os pido, vosotros seréis mi grupo especial para oración y conversión mediante vuestros propios sacrificios. En muchos de los casos, en aquellos en los cuales poseéis el don de la palabra, por vuestra prédica, y en otros si poseéis el don del silencio, por vuestro dolor físico o espiritual ofrecido.
Vuestro Dios no habla cosas elegantes, ni habla cosas de moda, ni comenta hechos de actualidad para que os regocigéis en saber, primero que otros, algunas cosas; el Señor ha venido a buscar y a pedir mayor espiritualidad, mayor piedad, mayor amor y menos interés de vuestra parte, en la entrega, más fraternidad y menos comercio en vuestras relaciones propias. A muchos os ha convencido la reunión programada para el día trece, al ver el poder de convocatoria del nombre de su Señor, pero os digo, que no habéis visto ni el comienzo, mas no entréis en esto solo por el interés de figurar, entrad a entregar vuestra alma a los pies de vuestra Madre.
Hoy habéis orado decididamente mal, tenéis aún tiempo de corregiros, estáis muy dispersos en vuestros pensamientos. Los jefes de los grupos corrigen a estos grupos comando, pues un error puede costarles la vida, Yo os corrijo pues también vuestros errores pueden costaros la auténtica vida. Se dice: “No os durmáis en los laureles”, y así es, pues los laureles y la gloria son para el Señor, no para vosotros.1 Os encomendaré una tarea para esta próxima semana. Elegid, elegid algún pecador de vuestra familia2... contad cinco minutos y ya estará bien... elegid a un pecador de vuestra familia o conocido y haced durante toda la semana todos los sacrificios, oraciones, plegarias, renuncias, reemplazos, aún en la sagrada eucaristía, mencionándolo de continuo, Yo os ayudaré en esta tarea por intentar su conversión, si lo lográis, sabed que el Señor ha actuado, si no la lográis vuestro intento vale también para mí, pero todo resultará según vuestra fe, haced este apostolado de sacrificio y víctima, hacedlo por mí.
¿Y la Virgen, Señor?... Dice el Señor que había prometido hoy la presencia especial de su Madre, existe ya desde el momento en que hay tres imágenes benditas especialmente entre vosotros pero también está la presencia real y verdadera de la Virgen, de la Madre del Cielo, de la Reina, Ella está haciendo su oración también con nosotros y nos acompaña desde el comienzo, sufre con los que están sufriendo, pide con los que piden y da gracias con los agradecidos, todo con nosotros y por nosotros para llevarnos al Señor. Ella también está especialmente preocupada por los niños, dice que debemos afinar nuestro trabajo con los niños enseñándoles las medidas de piedad que harán de ellos hermosos brotes de amor del Señor.
Dice también el Señor que debemos tratar de reproducir algunos de los mensajes en cinta para que los escuchen otros que no pueden estar aquí, no todos (los mensajes), dice que elijamos algunos, los más profundos, lo que debemos tener en cuenta es el lugar donde están destinadas estas cintas. En especial aquellos lugares más lejanos donde probablemente llegará el Señor en este tipo de reuniones dentro de un tiempo.
Pide que oremos mucho por nuestro país que está tratando de ser quebrantado también desde el aspecto económico por su doctrina infiltrada subrepticiamente en los hombres del gobierno que han transado con el enemigo y que esto no es política, pues no se menciona partido alguno porque todos son ovejas de mi rebaño, dice el Señor, pero guardaos de los lobos.
¿Está bien todo ya?3 Haced esta última decena también por el Santo Padre pues necesita mucho de vuestro apoyo. Hay en otras partes del mundo grupos que están surgiendo, dice el Señor, y que también están unidos a Él y que forman parte de estos elegidos para orar, sufrir y predicar con vuestra vida. Continuad vuestra oración, luego recibiréis la bendición y alguna palabra de vuestra Madre que está aquí, pero orad con fervor y piedad.
Lectura: I Corintios, Cap. 14, Vers. 20.
Va a hacer ahora la bendición el Señor pero quiere la Virgen decirnos también alguna palabra en este día: Soy vuestra Madre del Cielo, aquella que os habla y os llama a su lado. Sabed que el enemigo está atacando preferentemente la unidad de las familias intentando crear un clima de desorden disfrazado de falsa libertad, este engaño solo puede ser destruído mediante la oración y la recepción de los sacramentos, por eso estos objetos que vamos a bendecir hoy con mi Hijo, llevarán bendición para aquellos matrimonios y familias que recen unidos. La gracia irá manteniendo la unidad de los que oren y acercando a los que no lo hacen. Es otra forma que tenemos de acercarlos y prevenir... Prevenir en ustedes los efectos destructivos del avance del mal... si... permíteme amado Hijo que pronuncie Yo la bendición. Recibid en nombre del Señor todopoderoso bendición sobre estos objetos destinados a culto y oración divina, ellos llevarán paz y unidad a las familias. En mi nombre Yo bendigo, dice el Señor, con las virtudes que ha enunciado mi Santa Madre y por el poder del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, estos objetos, sed dignos de las gracias que portan usándolos para vuestra conversión personal.
Ponéos de rodillas, recibid paz de quién ha creado la paz, recibid bien de quién es bien supremo, recibid amor del amor, Yo os bendigo por haberos reunido en mi nombre, recibid en el nombre del Padre, del Hijo, y del Espíritu Santo. Id en paz, lo que el Señor apoye nadie podrá derrotar.
1 en esta vida.
2 una persona se descompone; el Señor hace tres veces la señal de la cruz.
3 pregunta si se recupera la persona descompuesta.
EL BUEN PASTOR
COPYRIGHT BY FUNDACIÓN MISERICORDIA DIVINA
ASOCIACIÓN DE LAICOS CATÓLICOS
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